Voces de mujer
Espacio de reflexión, denuncia, recreo y conocimiento. No, no es demasiado si lo hacemos.
sábado, 8 de septiembre de 2018
miércoles, 18 de julio de 2018
Sigo en pie
Leo, pienso, trabajo, sufro, disfruto... "lo importante es sentir la vida" que diría Carmen de Burgos.
También hiero a veces y no me gusta, lo paso mal, pero hay momentos en los que no veo más salida para intentar mantener mi dignidad.
Ya soy otra, más feliz, la verdad, con algún duelo a cuestas, pero ¿ quièn carece de ellos?
Ayer acabé " Celia en la revolución" de Elena Fortún. Inmensa en la exposición sencilla de una de nuestras mayores tragedias recientes. Hoy acabaré "Todos llevan máscara de Laura Freixas. El título me recordaba una historia - no sé si de Las mil y una noches" en la que un emperador que quería mantenerse eternamente joven se hizo fabricar una máscara. Pasaron muchísimos años y el pueblo se asombraba al ver que su emperador no envejecía. Pero llegó la muerte. Entonces alguien se dio cuenta de que un hilo finísimo se distinguía en la sien. Tiró, y tiró muy despacio hasta despegar la máscara. Entonces, con asombre de todos, vieron que el rostro del emperador era exactamente igual al de la máscara.
Me cuesta leer el año 96 de L. Freixas. Todo lo asocio al tiempo de mi pérdida más terrible. Pero me gusta, es honesta y no esconde esas pequeñas miserias de las que estamos hechas. Lo acabaré. Me recuerda tambièn los diarios de V. Woolf. Hay que ser valientes. Yo también lo serè algún día.
Sólo me arrepiento de las veces que pedí perdón sin deber hacerlo. He perdido y ganado en estos dos años, pero en mi balanza personal las ganancias superan las pérdidas.
Soy moderadamente feliz.
También hiero a veces y no me gusta, lo paso mal, pero hay momentos en los que no veo más salida para intentar mantener mi dignidad.
Ya soy otra, más feliz, la verdad, con algún duelo a cuestas, pero ¿ quièn carece de ellos?
Ayer acabé " Celia en la revolución" de Elena Fortún. Inmensa en la exposición sencilla de una de nuestras mayores tragedias recientes. Hoy acabaré "Todos llevan máscara de Laura Freixas. El título me recordaba una historia - no sé si de Las mil y una noches" en la que un emperador que quería mantenerse eternamente joven se hizo fabricar una máscara. Pasaron muchísimos años y el pueblo se asombraba al ver que su emperador no envejecía. Pero llegó la muerte. Entonces alguien se dio cuenta de que un hilo finísimo se distinguía en la sien. Tiró, y tiró muy despacio hasta despegar la máscara. Entonces, con asombre de todos, vieron que el rostro del emperador era exactamente igual al de la máscara.
Me cuesta leer el año 96 de L. Freixas. Todo lo asocio al tiempo de mi pérdida más terrible. Pero me gusta, es honesta y no esconde esas pequeñas miserias de las que estamos hechas. Lo acabaré. Me recuerda tambièn los diarios de V. Woolf. Hay que ser valientes. Yo también lo serè algún día.
Sólo me arrepiento de las veces que pedí perdón sin deber hacerlo. He perdido y ganado en estos dos años, pero en mi balanza personal las ganancias superan las pérdidas.
Soy moderadamente feliz.
lunes, 28 de mayo de 2018
De investigación y formación
Existen maneras de ver o estar en el mundo; a mí me parece que si no tenemos una base en formación, no transmitimos nada, es más, estamos vacías y eso se nota. Transmites cuando crees en algo, cuando te implicas, trabajas, reconoces... Y eso nos pasó en la Obra "Beatriz Galindo en Estocolmo" basada en un libro de Blanca Baltés.
Aquí una muestra de las sillas, todo el decorado contenía un mimo y un amor perceptible incluso para las personas más ajenas.
Y cómo no felicitar a las actrices, Carmen Gutierrez, al fondo, de lila interpretó a Isabel Oyarzábal con total versosimilitud, Ana Cerdeiriña, Carmen Gutierrez, Chupi LLorente y Gloria Vera llevaron adelante a Clara Campoamor, Victoria Kent, Concha Méndez y algunas "maridas".
Pocas veces he vivido una emoción semejante. Era nuestro Lyceum Club, éramos nosotras en ellas.
Mi vida sigue haciendo aquellas cosas en las que creo después de una de las mayores decepciones que me ha puesto la vida delante.Todo cambia.
lunes, 2 de abril de 2018
De Pessoa
"No sé quién soy, qué alma tengo. Cuando hablo con sinceridad no sé con qué sinceridad hablo. Soy variadamente otros que un yo no sé si existe (si es esos otros).
Siento creencias que no tengo. Me arroban ansias que repudio. Mi perpetua atención sobre mí perpetuamente me denuncia traiciones del alma a un carácter que quizá no tenga, ni ella cree que tengo.
Me siento múltiple. Soy como un cuarto con innumerables espejos fantásticos que dislocan reflejos falsos, una única anterior realidad que no está en ninguna ni está en todos.
Como el panteísta se siente árbol y hasta su flor, yo me siento varios seres. Me siento vivir vidas ajenas, en mí, incompletamente, como si mi ser participase de todos los hombres, incompletamente en cada uno, mediante una suma de no-yos sintetizados en un yo postizo.
Fernando Pessoa. "No sé quién soy, qué alma tengo". 1935
martes, 13 de marzo de 2018
De feminismo
Llevo doce años trabajando, formándome y viviendo el feminismo. No puedo separar mi vida del feminismo. No sé si es o no un deber ético; yo lo vivo como una necesidad. Tengo un sentimiento de gratitud hacia las grandes mujeres que he leído y conocido. Porque ellas me hicieron mejor persona, o eso creo. He leído con pasión, subrayado... Me he emocionado y he compartido y comparto en un bar, en redes, en comidas con mi familia... Soy apasionada y soy feminista.
Marcela Lagarde, Kate Millet, Mery Wollnstoncraft, Amelia Valcárcel, Nuria Varela, Ana de Miguel, Isabel Franc, Betty Friedan, Victoria Sendón de León, Yayo Herrero, Beatriz Gimeno, Elena Simón, Victoria Camps, Alicia Puleo, Cristine de Pizán, Olympia de Gouges, Flora Tristán, Lidia Falcón, Simone de Beauvoir, Silvia Federici, Despentes, Laura Freixas, Judith Butler -sí, también-...
Ya veis que salen sin orden, tal vez sea el sentido de la urgencia.
Me dejaré títulos, autoras. Son libros que tengo en casa, perfectamente localizados y que me sostienen, me aseguran, me recuerdan que "soy mujer y un entrañable calor me abriga cuando el mundo me golpea" - (A. Pizarnik)
He trabajado en un espacio muchos años del que me he visto expulsada. Me ha dado grandes satisfacciones y últimamente bastantes decepciones. No voy a hablar de culpas. Ni sirve ni interesa. Pero sí del hecho de que sigo viva y no voy a deshacerme en la nada.
Nos amparamos en otra asociación. Porque no soy sola; soy también los otros y las otras, como cualquiera. Decidimos trabajar a nivel comarcal y ahí estamos, en nuestra comarca de la que forma parte Orihuela. Por eso nuestro derecho a ser también en Orihuela. Y no tenemos ánimo de separar, pero si vamos a ejercer el derecho a ser en cualquier lugar.
Somos Mujeres por Mujeres Jacarilla 2012. Trabajamos a nivel comarcal y hay mucho por hacer.
Y ahí andamos.
viernes, 16 de febrero de 2018
Vemos lo que somos
Decía Pessoa, cuya exposición en el Reina Sofía esperamos ver el domingo, que no vemos lo que vemos, vemos lo que somos. Por eso creo que en este viaje que hoy emprendemos veremos mucho. Porque mucho ha sido lo investigado, aprendido, intercambiado y disfrutado.
En Madrid haremos un recorrido partiendo de La Casa de las Siete Chimeneas, sede de la fundación del Lyceum y pasaremos por lugares emblemáticos relacionados con las mujeres trabajadas de la mano de Experimenta Madrid. Por la tarde asistiremos a la representación de Beatriz Galindo -alias de Isabel Oyarzábal- para terminar el domingo en el Reina Sofía donde haremos la visita con mirada de género organizada por Jane. Hay cuadros de mujeres inmensas completamente desconocidas
El viaje ya lo llevamos dentro. La concreción será un trámite.
Este dibujo de Maria Marta Guzzeti me ha parecido ilustrativo. Maria Marta caminó con nosotras en nuestros comienzos y ahora, de manera recurrente, pienso en lo que fue y lo que es, en lo vivido y lo sufrido y en la necesidad de emprender vuelo.
Tres palabras- tres clavos
sujetándose al cuerpos
tres alas en mi alma
sosteniéndome el vuelo
El día se hizo luz
cuando rompí el silencio.
Después... Tú ya lo sabes
Resucité hacia dentro
Fui distinta y la misma.
Me despojé en secreto
y me quedé sin mí
por llenarme de cieno
Tres palabras; tres clavos
para quietar mi cuerpo
y despertar mi alma
Tres flechas en lo eterno
Tres dones de Tu amor
Tres rosas en mi cieno.
Ernestina de Champourcín
Tres palabras- tres clavos
sujetándose al cuerpos
tres alas en mi alma
sosteniéndome el vuelo
El día se hizo luz
cuando rompí el silencio.
Después... Tú ya lo sabes
Resucité hacia dentro
Fui distinta y la misma.
Me despojé en secreto
y me quedé sin mí
por llenarme de cieno
Tres palabras; tres clavos
para quietar mi cuerpo
y despertar mi alma
Tres flechas en lo eterno
Tres dones de Tu amor
Tres rosas en mi cieno.
Ernestina de Champourcín
domingo, 4 de febrero de 2018
De regreso a casa
Buenos días a la buena gente. Regreso de un viaje diferente, no tan largo, difícil y escabroso como el anterior. Y regreso con ganas de dar a la risa y a la alegría el espacio que merecen.
Recuperamos el ritmo y seguimos.
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