sábado, 27 de octubre de 2007

Símiles

Alguien me decía anoche que cómo es posible que sólo sean los pesqueros españoles los que se encuentren cayucos. Cierto, pensé. Luego pensaba en el acoso mediático que se ha producido con la agresión a la chica ecuatoriana. Se ha tildado al tercer pasajero de permanecer impasible frente a lo que veía. Incluso Aguirre anda dándoselas de demócrata y antifascista de toda la vida recordándonos que así empezó el fascismo. Y yo seguía preguntándome anoche qué pasaría si hubiesen cámaras en el mar y se nos pasaran las imágenes de todos los pesqueros que pasan de largo y se juzgaran a los que incumplen el primer deber de auxiliar a naúfragos, y las campañas de desprestigio salpicaran a todos aquellos que no hicieron nada...
Aunque ahora pienso que tal vez sí que existan pruebas de. Pero siempre será más rentable juzgar o cuestionar a una criatura acojonada ante un cerril de tamaña naturaleza.

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