Es posible que alguien piense que no tenemos memoria; incluso es posible que alguien piense que no tenemos inteligencia. Pero muy poquita inteligencia y memoria se necesitan para tener una idea bastante aproximada de lo que aquí, en este pueblo nuestro, está pasando.
Se convoca un concurso con un pliego de condiciones, se valora, se trajina, se piden informes para que las espaldas queden cubiertas y se resuelve que la empresa fulana es la más idónea. Antes de que el hecho tenga carácter definitivo aparece un empresario y nos cuenta todo lo que hay bajo esa adjudicación: intereses, sobornos, promesas... , y el escándalo da los argumentos necesarios a unos y a otras(zaplanistas y campistas) para que el proceso quede paralizado. Las prácticas empleadas por dicho empresario son mafiosas, aunque desvelan (presuntamente) otras prácticas no menos mafiosas. El pueblo se manifiesta, interviene la fiscalía, el escándalo les sobrepasa y el alcalde deja pasar el tiempo, no sabemos si por recomendación de alguien.
Ahora, con más de lo mismo, más PP porque el pueblo soberano así lo ha querido, la historieta sigue. Con 60.000 euros en informes (que sepamos) la alcaldesa y su equipo dejan desierto el concurso. Y leo esta mañana en la verdad:
Los tres portavoces aseguraron que durante todo el fin de semana han denunciado de manera pormenorizada todo el Pleno y Ezcurra recordó la postura de Eva Ortiz y Araceli Vilella y se preguntó si «ellas tenían algún atisbo de ilegalidad, ¿es que votaron algo que no se ajustaba a la legalidad?», aseguró, y exigió que algún integrante del grupo de gobierno del Partido Popular aclare estas cuestiones ya que, desde el Pleno, no han tenido ningún contacto con ellos.
Y me pregunto cómo es posible que sea legal todo esto. Aquí alguien tendrá que pagar, pero cuándo. Y ahí está la madre del cordero. Ahí tienen a Fabra con un sumario que no se lo salta un galgo y los jueces que deben enfrentarse a él, llegan, se espantan, piden traslado- no sabemos si por recomendación de alguien(¿?)- y entre tanto los asuntos prescriben y nuestra alcaldesa no se digna a dar explicaciones a su ciudadanía y a quemarse en la hoguera que ella ha contribuido a avivar.
Las grietas que existen en nuestro tan cacareado Estado de Derecho son demasiado anchurosas y profundas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario