domingo, 29 de abril de 2007

Alejandra Pizarnik



Nació en Buenos Aires un 29 de abril de 1.936 y se suicidó con tan sólo 36 años.
Me pregunto qué pasó por su cabeza para titular uno de sus libros más importantes como la obra de El Bosco, Extracción de la piedra de la locura:
Haberse muerto en quien se era y en quien se amaba, haberse y no haberse dado vuelta como un cielo tormentoso y celeste al mismo tiempo. Hubiese querido más que esto y a la vez nada.
Me seduce su prosa, su poesía, su figura, su pesimismo encarnecido y su lucidez rayana en la locura.
En su poema, La última inocencia nos cuenta su tragedia en tres versos:
Partir
deshacerse de las miradas
piedras opresoras
que duermen en la garganta
Si esas piedras hubiesen dormido en otra parte...
Y sobre todo mirar con inocencia. Como si no pasara nada, lo cual es cierto.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo no sé de pájaros,
no conozco la historia del fuego.
Pero creo que mi soledad debería tener alas.