Se llama Rosa Aragoneses y el día de los enamorados de 2002 su pareja, con la que había roto relaciones, se acercó al instituto de Alicante donde trabajaba, la roció con ácido y le prendió fuego. Lo recordamos, sí. Es una historia más por la que nos manifestamos y nos lamentamos. Lo que no sabemos, tal vez, es qué ha pasado después y cómo está en la actualidad.Al agresor, Pedro Ruiz, le fue impuesta una pena de doce años de reclusión y al día de hoy está en la cárcel.
Rosa pasó 78 días hospitalizada y lleva 34 operaciones. El juez le concedió una indemnización de 300.000 euros, pero la Seguridad Social recurrió la decisión de la Generalitat de considerar lo sucedido como un accidente laboral por lo que se quedó con 500 euros de sueldo mínimo y tuvo que salir de su casa a vivir con su madre.
Es decir, que los asuntos no acaban con los agresores en la cárcel. La historia sigue. las historias siguen.
(Foto de Juan Carlos Soler)
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